Cuando una mujer contrae matrimonio lo hace enamorada y con un proyecto en común con su esposo. Pero lamentablemente no siempre las uniones matrimoniales tienen éxito. No todo es un cuento de color rosa. En algunos casos se empieza de a poco a ver el maltrato hacia la mujer. El hombre por alguna razón empieza a cambiar su trato hacia ella y comienzan los celos, el trato machista, la humillación y los insultos. A veces la mujer logra escapar de toda esta situación a tiempo, pero en otros casos cuando ya hay hijos en común a ella se le hace difícil salir de ese ambiente de maltrato y soporta todo tipo de agravio. Comienza a perder la alegría y su angustia se acrecienta y el desvelo en las noches la persigue. De eso habla mi poema “Seca tus lágrimas”
Seca tus lágrimas
(Arjona Delia)
De un día para otro
transformaron sus sueños,
sucumbieron esperanzas
y brotaron sus lamentos.
El hombre que más quería
envenenó sus mañanas,
¡se equivocó en la vida
confiando en su palabra!
Con crueldad y padecer
fue matando su anhelo,
con lágrimas de agonía
¡ella paga un alto precio!
La angustia acrecienta,
se esfuma la alegría,
la inquietud, el desvelo,
le expanden sus heridas.
Hoy mi pluma es poesía
para darle esperanza,
¡le ofrezco el auxilio
para secar sus lágrimas!
Poema publicado en el libro "Mujer libre"
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